Bueno lo prometido es deuda. La calidad de este blog no llega a la brillantez del Dossier de RASH pero hacemos lo que podemos para destapar a tipejos nostálgicos de la Deutschland de los años treinta que se ocultan en las altas esferas del pop español y así camuflar su filonazismo (ya sabéis, amamos y odiamos esa palabra). Las imágenes hablan por sí mismas. Ya no vale decir "no, es que el primer disco de Skrewdriver era punk".
Miguel Bosé es un supremacista y un negacionista, y esto está causando una agitación de plumas en nuestro estanque.
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