viernes, 9 de septiembre de 2016

EL PRÍNCIPE

Como todas las historias bonitas, las cosas llegan a su fin. Ayer por la mañana fallecía en Miami Cecil Bustamente Campbell, más conocido como Prince Buster.



Lo cierto es que me entristece muchísimo este fallecimiento por lo que personalmente ha significado este señor, pero más cierto es que la mella que ha dejado, tanto en la música jamaicana como en la música en general, no tiene comparación.



Resulta siempre gracioso ver cómo ciertos artistas dejan una huella en la música que es capaz de atravesar las paredes, brincando por estilos, para acabar haciéndote sonreír cuando escuchas una canción que nada tiene que ver con la influencia de la que proviene, aunque lo cierto es que la influencia está ahí, flotando. Prince Buster supo hacerlo. ¿Tú prima no escucha Amy Winehouse? ¿No tenemos grabada a fuego la melodía con la que anunciaban electrodomésticos los señores de Bosch? Huele al Príncipe. Sabe a Príncipe. Está ahí.



Fue condecorado por el gobierno jamaicano por su aportación a la música. ¿Por qué? Porque él era El Príncipe.

Con todo respeto a la ingente cantidad de grandes músicos y productores que parió la Perla Negra, estamos ante un caso realmente excepcional. Un fundador de fundadores. Un pionero de verdad. Nació el ska y ahí estaba él, el ginecólogo en la sala de partos, ayudando a traer al mundo la semilla de La Música para moldearla a su antojo.

¿Quién estaba ahí cuando surgió el ska?



¿Os suena el Sombrero Club?



¿Quién estaba ahí cuando surgió el rocksteady?


¿Quién se posicionó en favor del movimiento rude boy?



¿Quién llevaba las riendas del reggae?



¿Quién estaba ahí en plena ebullición del black power?



¿Quién estaba ahí para enseñarle al joven Judge Dread (¿por qué se pondría ese nombre?) la correcta pronunciación de la palabra "polla" al ritmo del Tamborilero, erigiéndose así como el adalid del porn reggae?


¿Quién estaba ahí para bautizar al grupo Madness?



¿Quién estaba ahí para echarle huevos y fundar un sello frente a Coxone y el Capo Reid?





¿Quién estaba ahí para inspirar a los Specials o a los Beat?



No se nos ha ido un cualquiera. Se nos ha ido una figura inconmensurable dentro de la cultura social y musical de Jamaica.

Poco más se puede decir de Prince Buster. Fue el mejor en algo que él mismo creó, y la música, la producción y las influencias que nos deja no tienen, tanto en calidad como en cantidad, ningún parangón.

¡A volar, Príncipe!


¡GRACIAS POR TODO!

¡CUAC!

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